Día 29: Lunes 28 de Noviembre de 2005

Señores, hoy he sido humillado por detrás. Antes de entrar con esta experiencia tan dolorosa para mi orgullo varonil, cuento un par de efemérides.

1. he pasado el video de Call On Me por la oficina (el de los pibones haciendo aerobic), y como era de esperar ha causado cuando menos desconcentración intensa… Incluso Kunihiko Owa (nuestro jefe) ha parado en uno de los ordenadores donde estábamos algunos mirando y no ha podido hacer otra cosa más que recoger sus babillas.

2. Nos cambiamos de sitio, amplían el número de puestos en la oficina y hacen reestructuración. Me han puesto al lado de Yu, Ningning (chino y china, CUIDADO CON LOS CHINOS QUE SON MUY CHUNGOOOOOS), Takako, otra chica Japonesa y el señor invisible. También tengo cerca a Ema, Marco, Hiroki y Aaron. Pero al menos conseguiré aliviar mi presión nasal, debido a los efluvios corporales de determinado personaje que todos los que habéis seguido esta Biblia sabéis quién es. El pobre Pedro es el que va a morir, porque tiene justo detrás a Randy, y enfrente a Aaron… Las dos unidades NO-limpiadoras de la oficina. Pobrecillo

Pero vamos al tema de mi culo. A aquellos a los que no les gusten los detalles “sucios”, por favor absténganse de leer las líneas sucesivas en las que detallo como El Señor Toto me ha dado por detrás. Quién es el señor Toto, se preguntarán ustedes. Aquí esta la foto del “rompeculos”:

Como han podido deducir es el equivalente al Señor Roca en España (por aquí todo es Toto, así como en España todo es Roca). Esta máquina infernal salida de Dios sabe qué enferma mente, incorpora un “maravilloso” dispositivo limpiador de zonas intimas, tanto masculinas como femeninas. Solo doy gracias al Señor de no ser una mujer, pues al menos así solo he sido humillado por uno de mis orificios.

Ya nos habíamos encontrado en otras ocasiones. Nos habíamos mirado pero la cosa no había pasado de ahí. Otras veces él estaba ocupado “hablando” con otros compañeros de Planta, pero siempre le tenido recelo, Qué van a pensar de mi si me ven “hablando” con este señor! Pero hoy ha sido diferente. He entrado, le he mirado fijamente, me ha respondido con un “ven paquí tonto”, y ahí que me he lanzado.

El recibimiento ha sido muy acogedor, pues estaba calentito (calentito me iba a poner). La relación ha empezado bien, nunca habían acogido mis nalgas de forma tan agradable. Pero como todo en Japón, es pequeñito, con lo que mis hábitos europeos siguen sufriendo, aunque he encontrado técnicas que ayudan mucho. Esto garantizo que lo que sigue puede dañar determinadas mentes, es escatológico de verdad, y MUY EXPLÍCITO (pero es lo que uno sufre por aquí) así que pasar a otro párrafo de verdad. Existen dos problemas principales con el tamaño. No es que el culo no entre bien ni nada, eso es superable. El problema es la parte delantera, que a lo tonto a lo tonto te golpea donde no debe, y cuando tiras de la cadena, el agüilla te enfría la puntita Y ES JODIDAMENTE DESAGRADABLE. La segunda es todavía peor. Qué puede ser peor? Pues es el tema del MARRÓN en sí. Porque resulta que los retretes son muy bajitos, pero mucho, con lo que todo está más cerca del lugar de salida. Los problemas que esto ocasiona creo que son demasiado desagradables como para contarlos, pero simplemente imaginar qué pasa cuando una columna toca el suelo… HORRIBLE. Luego hay otro tipo que tiene el nivel de agua bastante más alto, con lo que TODO queda flotando alegremente por ahí. SI NO QUEREIS QUE OS PASE ESTO EN JAPÓN, tenéis que mantener el pulsador de evacuar agua constantemente, para que se cree una fuerza constante de succión que os elimine los problemas. Es un poco incómodo, PERO DE VERDAD ES NECESARIO.

Siguiendo con mi sufrimiento a manos de TOTO-san, he conseguido terminar de darle todo lo que tenía que darle. En agradecimiento a tal acto de generosidad hacia él, me proporciona las siguientes opciones:

Los botones son claramente explicativos: PARA!!!!, dame por detrás, soy mujer y quiero que me hagas sentir como tal, sóplame un poquito que me escuece, selector de intensidad.

HA LLEGADO EL MOMENTO, tengo miedo, estoy cagao (valga la redundancia), no quiero probarlo. Cuando vine a Japón dije que tenía que conocer al señor TOTO… Allá vamos. Realmente despacio mi dedo índice se aproxima hacia el botón maldito. Lo presiono, mi pulso está acelerado, qué pasará ahora? Noto claramente como el Señor TOTO saca su “aparato” y… NOTO UN CHORRO DE AGUA TEMPLADA!!!!!!

No sé como definir mi cara, la frase que pensaba era: aahhh, que desagradable… El chorrito es cierto que consigue atinar bien en el canal de panamá, pero tiene truco, porque no es un chorrito puntual, sino que debe ser como de abanico, y abarca más que la propia unidad de extracción de residuos. Yo me pensaba que él mismo acabaría la función, pero no, hasta que no dices “PARA!!! “ él sigue a su rollo. Después un poquito de “sóplame que me escuece”. Igual, le tienes que decir que pare. No me quiero ni imaginar la cara del tío que estaba pasando por ahí y que debía estar escuchando los soniditos. De hecho yo cuando vuelva a pasar por ahí y escuche un ventilador o un chorrito, ya sé lo que está pasando. PERO LO PEOR DE TODO, es que no es efectivo, es una mierda (valga otra vez la redundancia). Hasta que no inventen las Tres Conchas me temo que estamos vendidos.

No creo que vuelva a repetir esta experiencia, la verdad, a no ser que considere que la situación es tan grave que lo requiere. Ha sido… humillante.

Papá, hoy he tenido mi primera experiencia sexual.

Ah si? Siéntate hijo mío y cuéntame

Si si, tengo yo el culo como para sentarme

Espero que con este relato aterrador os haya quitado las ganas de conocer al señor TOTO! Es una máquina infernal!